ECA CLASE 7
Hola Chico/as: Cómo están todos/as? Espero muy bien, cuidándose mucho y
con ganas de seguir trabajando juntos.
Hoy repasaremos los temas conversados en la Clase Virtual del Miércoles
13/5.
Sistema inmunitario
¿Qué es el sistema inmunitario?
El sistema inmunitario
es el sistema de defensa del cuerpo contra las infecciones. El sistema
inmunitario, ataca a los gérmenes invasores y nos ayuda a mantenernos sanos.
¿De qué partes consta el sistema inmunitario?
Muchas células y órganos colaboran entre sí
para proteger al cuerpo. Los glóbulos blancos (también llamados "leucocitos"), desempeñan un
papel importante en el sistema inmunitario.
Hay un tipo de glóbulos blancos,
llamados fagocitos, que devoran a los
organismos invasores. Otro tipo de glóbulos blancos, llamados linfocitos, ayudan al cuerpo a
reconocer a los invasores y a destruirlos.
Un tipo de fagocitos son los neutrófilos, que luchan contra
las bacterias. Si a un médico le preocupa que alguien tenga una infección
bacteriana, lo más probable es que le pida un análisis de sangre para saber si
tiene una cantidad muy elevada de neutrófilos. Hay otros tipos de fagocitos que
desempeñan sus propias funciones para asegurarse de que el cuerpo responde
adecuadamente a los gérmenes invasores.
Los dos tipos de linfocitos son los linfocitos B y los linfocitos T. Los linfocitos se
fabrican en la médula ósea y permanecen allí y maduran hasta convertirse en
linfocitos B, o bien se desplazan hasta la glándula del timo y maduran hasta
convertirse en linfocitos T. Los linfocitos B vienen a ser el sistema de
inteligencia militar del cuerpo: detectan a los invasores y los inmovilizan.
Los linfocitos T actúan como si fueran soldados: destruyen a los invasores que
ha detectado el sistema de inteligencia.
¿Cómo funciona el sistema inmunitario?
Cuando el
cuerpo detecta sustancias extrañas que lo invaden (llamadas “antígenos”), el
sistema inmunitario trabaja para reconocerlas y eliminarlas.
Los linfocitos
B se encargan de fabricar anticuerpos. Se trata de unas proteínas especializadas
que localizan e inmovilizan a antígenos específicos. Los anticuerpos siguen
existiendo en el cuerpo de una persona. Por lo tanto, si el sistema inmunitario
se vuelve a encontrar con ese antígeno, dispondrá de anticuerpos para que
desempeñen su función. Por eso, cuando una persona contrae determinada
enfermedad, como la varicela, lo más habitual es que no vuelva a contraer esa
enfermedad.
Esto también
explica que las vacunas sirvan para prevenir algunas enfermedades. Una vacuna
introduce en el cuerpo el antígeno de una forma que no hace que la persona
vacunada enferme. Pero permite que el cuerpo fabrique anticuerpos que la
protegerán de futuros ataques por parte del germen causante de esa enfermedad.
Aunque los
anticuerpos pueden reconocer un antígeno e inmovilizarlo, no lo pueden destruir
sin ayuda. Esa es función de los linfocitos T. Estas células se encargan de
destruir a los antígenos que han sido inmovilizados por los anticuerpos o a
aquellas células que se han infectado o que han cambiado por algún motivo.
(Algunos de los linfocitos T se llaman "células asesinas" o
"células k" [del inglés; killer = asesino]). Los linfocitos T también
ayudan a indicar a otras células (como los fagocitos) que desempeñen su
función.
Los anticuerpos
también pueden:
·
neutralizar toxinas (sustancias venenosas o perjudiciales) fabricadas
por distintos organismos.
·
activar un grupo de proteínas llamadas complemento que también forman
parte del sistema inmunitario. El sistema del complemento ayuda
a destruir bacterias, virus y células infectadas.
Todas estas
células especializadas y partes del sistema inmunitario ofrecen al cuerpo
protección contra las enfermedades. Esta protección se llama inmunidad.
Los seres
humanos tienen tres tipos de inmunidad: la innata, la adaptativa y la pasiva.
·
La inmunidad innata: todo el mundo nace con una inmunidad
innata (o natural), un tipo de protección general. Por ejemplo, la piel actúa
como una barrera para impedir que los gérmenes entren en el cuerpo. Y el
sistema inmunitario sabe reconocer cuándo algunos invasores pueden ser
peligrosos.
·
La inmunidad adaptativa: la
inmunidad adaptativa (o activa) se desarrolla a lo largo de la vida de una
persona. La inmunidad adaptativa se desarrolla cuando la gente se va exponiendo
a enfermedades o se inmuniza a ellas a través de las vacunas.
·
La inmunidad pasiva: la inmunidad pasiva es un tipo de
protección "prestada" de una fuente externa y es de breve duración.
Por ejemplo, los anticuerpos que contiene la leche materna proporcionan al bebé
una inmunidad temporal contra las enfermedades a que se había expuesto su
madre.
El sistema inmunitario necesita la ayuda de
las vacunas. Si te pones todas las vacunas recomendadas cuando te toque,
ayudarás a mantenerlo lo más sano posible. También te ayudarán a mantenerte
sano el hecho de lavarte las manos bien y con frecuencia para evitar las
infecciones, comer bien, hacer abundantes horas de sueño y de ejercicio
físico y acudir a todas tus revisiones médicas.
Lavarse las manos: por qué es importante
¿Por qué es tan importante lavarse las manos?
El lavado de
manos siempre ha sido la mejor manera de evitar enfermarse. Pero con los brotes
de coronavirus (COVID-19), el lavado de manos es más importante que nunca.
El coronavirus se propaga fácilmente. El
lavado de manos previene la propagación de gérmenes, incluido el coronavirus.
Cuando te lavas
las manos, te proteges de los gérmenes. También proteges a las personas de tu
familia. Y en el caso del coronavirus, cuando detienes la propagación de
gérmenes en tu casa, también proteges a las personas de tu comunidad.
¿Cuál es la mejor forma de lavarse las manos?
Aquí tienes
cómo quitarte los gérmenes de encima:
1. Mójate las manos con agua corriente limpia (tibia o fría). Asegúrate de que el agua
no está demasiado caliente.
2. Usa jabón y
frótate las manos enérgicamente durante aproximadamente 20 segundos. No hace
falta que utilices un jabón anti-bacteriano; sirve cualquier tipo de jabón.
3. Asegúrate de
que te lavas bien el área entre los dedos,
el dorso de las manos y debajo de las uñas, donde a los gérmenes les encanta
esconderse. ¡Y no te olvides de las muñecas!
4. Enjuágate las manos y sécatelas bien con una toalla limpia y seca.
¿Cuándo me debo lavar las manos?
Para poner fin
a la propagación de gérmenes, haz que lavarte las manos sea un hábito regular.
Es especialmente importante practicarlo:
·
antes de comer y de cocinar
·
después de ir al baño
·
después de limpiar la casa
·
después de tocar animales, incluyendo las mascotas de tu familia
·
después de visitar o cuidar de amigos o familiares enfermos
·
después de sonarte la nariz, toser o estornudar
·
después de estar en el exterior
·
después de manipular el correo o paquetes
¿Qué pasa si no
tienes agua y jabón? Los desinfectantes o exfoliantes para manos sin agua
también son una buena alternativa. Vienen en forma líquida, de toallita o en
aerosol. Puedes comprar envases pequeños para guardar en tu mochila, automóvil,
casillero, cartera o bolsa de deporte.
¿En qué ayuda el hecho de tener las manos
limpias?
Lavarse las manos adecuadamente es la primera
línea de defensa contra la propagación de muchas enfermedades, incluyendo al
coronavirus (COVID-19). También ayuda a protegerte de un resfriado o catarro
común hasta enfermedades más graves, como la meningitis, la bronquiolitis,
la gripe, la hepatitis A, y muchos tipos de diarrea.
¿Cómo se propagan los gérmenes?
Los gérmenes se
pueden propagar de muchas formas diferentes, como:
·
al tocar unas manos sucias
·
al cambiar los pañales
·
a través de agua o de comida contaminadas
·
a través de las gotitas expulsadas en el aire durante la tos o los
estornudos
·
a través de superficies contaminadas
·
a través del contacto con fluidos corporales de una persona enferma
Cuando entras
en contacto con gérmenes, te puedes infectar solo al tocarte los ojos, la nariz
o la boca.
Por lo tanto,
¡no subestimes la importancia de lavarte las manos! Es una de las mejores cosas
que puedes hacer para ayudarte a tí mismo y a los demás.
¿Cuánto necesito dormir?
¿Cuánto necesito dormir?
La mayoría de
los adolescentes necesitan dormir aproximadamente de 8 a 10 horas por la noche.
Dormir la cantidad adecuada de horas es fundamental para cualquier persona que
quiera hacer bien los exámenes o rendir en el deporte. Pero, lamentablemente,
muchos adolescentes no duermen lo suficiente.
¿Por qué los adolescentes no duermen lo
suficiente?
Los
adolescentes solían tener mala fama por quedarse despiertos hasta muy tarde por
la noche, llegar tarde a sus centros de estudios por haberse quedado dormidos y
dormirse en las clases. Pero el patrón de sueño de los adolescentes difiere del
que tienen los niños y los adultos.
Durante la
adolescencia, el ritmo circadiano del cuerpo (una especie de reloj biológico
interno) experimenta un reajuste temporal y pasa a indicar a la persona que se
duerma y se despierte más tarde. Este cambio en el ritmo circadiano es probable
que se deba a que la melatonina (una hormona cerebral) se libera más tarde por
la noche en los adolescentes que en los niños y en los adultos. Esto dificulta
que los adolescentes logren conciliar el sueño temprano por la noche.
Estos cambios
en el ritmo circadiano coinciden con una etapa en la que los adolescentes están
más ocupados que antes. En la mayoría de los adolescentes, la presión por
rendir en los estudios es mayor que la que tenían cuando eran niños y les
resulta más difícil salir adelante sin estudiar mucho. Además, los adolescentes
también tienen más demandas de tiempo: desde las actividades extraescolares,
deportivas o de otro tipo, hasta los trabajos de media jornada. El uso de dispositivos
electrónicos, entre los que se incluyen los móviles, las tabletas y las
computadoras, también dificulta que los adolescentes concilien el sueño. Muchos
adolescentes se quedan hasta las tantas de la noche escribiendo mensajes de
texto a sus amigos, jugando a videojuegos y viendo vídeos.
El hecho de que
las clases empiecen muy temprano también desempeña un papel en la falta de
sueño de los adolescentes. Los adolescentes que no se duermen hasta pasada la
medianoche siguen teniendo que levantarse temprano para llegar a tiempo a sus
centros de estudios, lo que significa que solo duermen 6 o 7 horas, o menos,
por la noche. Perder una o dos horas de sueño una noche aislada puede no
parecer problemático pero, a la larga, esto puede generar un importante déficit
de sueño.
¿Por qué es tan importante dormir?
Dormir es
importante para dar lo mejor de uno mismo. Los adolescentes necesitan dormir
para:
·
prestar atención y aprender en sus centros de estudios
·
mejorar su rendimiento atlético
·
crecer y desarrollarse con normalidad
·
estar sanos
El déficit de
sueño puede conducir a sacar malas notas, tener problemas relacionales y
conducir con sueño. Quedarse dormido mientras se conduce puede provocar graves
accidentes de tráfico.
La gente con
déficit de sueño puede tener:
·
problemas de salud, como las enfermedades cardíacas y la obesidad
·
dificultades para combatir las infecciones
·
problemas emocionales, como la depresión
¿Estoy durmiendo lo suficiente?
Aunque creas
que estás durmiendo lo suficiente, es posible que no sea así. Es posible que
necesites dormir más si:
·
te cuesta mucho levantarte por las mañanas
·
tienes muchas dificultades para concentrarte
·
te quedas dormido en las clases
·
estás irritable, malhumorado, triste o deprimido
¿Qué puedo hacer para dormir más?
He aquí algunas de las cosas que te pueden
ayudar a dormir mejor:
Sigue un horario regular
para acostarte y para despertarte. Trata de adaptarte a ese horario, con un margen de variabilidad de
una a dos horas, incluso los fines de semana.
Haz ejercicio físico con regularidad. Hacer ejercicio con
regularidad te puede ayudar a dormir mejor. Pero intenta no hacer ejercicio
justo antes de acostarte. Te podría activar y dificultar que conciliaras el
sueño.
Evita la cafeína. No tomes
bebidas con cafeína, como los refrescos de cola, el té o el café, por la tarde.
La nicotina (tanto fumada como vapeada) y el alcohol pueden
provocar inquietud y hacer que te despiertes por la noche.
Relájate reduciendo la
intensidad de las luces. La luz le indica al cerebro que es hora de estar despierto.
Mantenerte alejado de luces fuertes (incluyendo las pantallas de cualquier
dispositivo), escuchar música suave y tranquila o meditar antes de acostarte te
puede ayudar a relajar el cuerpo y la mente.
Desconecta de la
electrónica. No uses
el teléfono móvil (incluyendo los mensajes de texto), la tableta, la
computadora, la televisión u otros dispositivos electrónicos por lo menos
durante 1 hora antes de acostarte.
No hagas siestas
demasiado largas. Dormir
durante más de 30 minutos en las horas de sol o hacer la siesta demasiado tarde
puede impedir que concilies el sueño cuando te acuestes por la noche.
Crea un ambiente
favorecedor del sueño. La gente duerme mejor en habitaciones oscuras y ligeramente
frescas. Si tu entorno es ruidoso y necesitas desconectar del ruido para
conciliar el sueño, utiliza sonidos de la naturaleza o una máquina (o
aplicación) de ruido blanco.
¿Por qué es importante hacer ejercicio?
Lo más probable
es que hayas oído incontables veces que hacer ejercicio es "bueno para
ti". Pero ¿sabías que, en el fondo, también te puede ayudar a sentirte
bien? Hacer la cantidad adecuada de ejercicio físico puede aumentar tu nivel de
energía y hasta ayudarte a mejorar el estado de ánimo.
Ventajas y efectos beneficiosos del ejercicio
físico
Los expertos
recomiendan que los adolescentes hagan 60 minutos o más de actividad física de
moderada a vigorosa cada día. He aquí algunas de las razones:
·
El ejercicio físico es bueno para todas las partes del
cuerpo, incluida la mente. El ejercicio físico hace que el
cuerpo genere sustancias químicas que pueden ayudar a una persona a sentirse
bien. El ejercicio físico puede ayudar a las personas a dormir mejor. También
puede ayudar a algunas personas que padecen una depresión leve o que tienen
baja autoestima. Además, el ejercicio puede dar a la gente una verdadera
sensación de logro y orgullo por alcanzar determinadas metas, como batir un
récord personal en 100 metros llanos.
·
El ejercicio físico ayuda a la gente a perder peso y
reduce el riesgo de desarrollar algunas enfermedades. El
ejercicio físico regular reduce los riesgos de ciertas enfermedades, como
obesidad, diabetes tipo 2 e hipertensión. El ejercicio físico puede ayudar a
mantener el cuerpo en un peso saludable.
·
El ejercicio ayuda a envejecer bien. Quizás no
te parezca importante ahora, pero tu cuerpo te lo agradecerá más adelante. Por
ejemplo, la osteoporosis (un afinamiento de los huesos) puede convertirse en un
problema a medida que la gente envejece. El ejercicio físico que te obliga a
sostener el peso de tu propio cuerpo (como saltar, correr o caminar) puede
ayudar a fortalecer los huesos.
Las tres partes
de una rutina equilibrada de ejercicio físico son las siguientes: los
ejercicios aeróbicos, los ejercicios de fuerza y los ejercicios de
flexibilidad.
Ejercicios aeróbicos
Al igual que otros músculos, el corazón disfruta de un buen
entrenamiento. Un ejercicio aeróbico es cualquier tipo de ejercicio que haga
que el corazón bombee y lata más fuerte. Si proporcionas a tu corazón
y tus pulmones este tipo de entrenamiento con regularidad, se harán más fuertes
y serán más eficientes a la hora de llevar oxígeno (en forma de células
portadoras de oxígeno) a todas las partes de tu cuerpo.
Si formas parte de un equipo deportivo, lo más probable es que ya estés
haciendo 60 minutos o más de ejercicio físico de moderado a vigoroso los días
en que entrenas. Algunos de los deportes de equipo que proporcionan un buen
entrenamiento aeróbico son, el baloncesto, el fútbol, el hockey y el remo.
Pero, si no practicas ningún deporte de equipo, no te preocupes; hay
muchas formas de hacer ejercicio aeróbico, sea a solas o con tus amigos. Estas
formas incluyen montar en bicicleta, correr, nadar, bailar, patinar, jugar al
tenis, practicar esquí de fondo, el excursionismo y andar deprisa.
Entrenamiento de resistencia
El corazón no
es el único músculo que se beneficia del ejercicio físico regular. Los demás
músculos de tu cuerpo también benefician con el ejercicio físico. Cuando usas
los músculos, estos se vuelven más fuertes.
Los músculos
fuertes también son una ventaja porque sostienen las articulaciones y ayudan a
prevenir lesiones. Además, el músculo quema más energía que la grasa cuando
estás en reposo, de modo que el desarrollo muscular te ayudará a quemar más
calorías y a mantener un peso saludable.
No es necesario
que levantes pesas para fortalecer los músculos y los huesos. Los distintos
tipos de ejercicios fortalecen distintos tipos grupos musculares, por ejemplo:
·
Para fortalecer los brazos, prueba el remo o el esquí
de fondo. Las flexiones y las dominadas, presentes en las clases de gimnasia
tradicionales, también son buenas para desarrollar los músculos de los brazos.
·
Para fortalecer las piernas, prueba andar en
bicicleta, remar o patinar. Las sentadillas y los levantamientos de piernas
también son buenos para las piernas.
·
Para fortalecer el abdomen y el centro del cuerpo, lo
mejor es el remo, el yoga o pilates, las planchas y los abdominales.
Ejercicios de flexibilidad
Fortalecer el
corazón y los demás músculos no es la única meta importante del ejercicio
físico. El ejercicio físico también puede ayudar a mantener la flexibilidad, lo
que significa que los músculos y las articulaciones se estiran y se doblan con
facilidad.
La flexibilidad
también ayuda a mejorar el rendimiento deportivo. Algunas actividades, como la
danza y las artes marciales, requieren mucha flexibilidad. Pero una mayor
flexibilidad también puede ayudar a las personas a mejorar el rendimiento en
otros deportes, como el fútbol..
Es fácil
encontrar deportes y actividades que trabajan la flexibilidad. Las artes
marciales (como el karate), el ballet, la gimnasia artística y el yoga son
buenas opciones. Hacer estiramientos después de cada entrenamiento también te
ayudará a mejorar la flexibilidad.
¿Qué es lo más adecuado para mí?
Uno de los
principales motivos por los que la gente abandona un programa de ejercicio
físico es la falta de interés: si lo que estás haciendo no es divertido, es
difícil que lo sigas haciendo. Lo bueno es que puedes probar muchísimos
deportes y actividades diferentes hasta dar con el que te guste más.
A la hora de
elegir el ejercicio adecuado para ti, te puede ayudar el hecho de pensar en cómo
es tu personalidad para entrenar. Por ejemplo, ¿te gusta hacer ejercicio solo y
siguiendo tu propio horario? En caso afirmativo, los deportes como el ciclismo
o el esquí sobre tabla o snowboard podrían ser una opción adecuada. ¿O te gusta
la motivación compartida y el compañerismo propio de los deportes de equipo?
Los deportes escolares, los deportes intramuros, los equipos de clubes y los
juegos espontáneos son excelentes formas de mantenerte activo junto con otras
personas.
También deberás
considerar aspectos puramente prácticos, como si la actividad que has elegido
es asequible para tu bolsillo y está disponible en tu zona. (Por ejemplo, las
actividades como la equitación son más difíciles para las personas que viven en
la ciudad) También deberías pensar en cuánto tiempo te puedes reservar para
hacer deporte.
Es una buena
idea hablar con alguien que entienda sobre este tema, como
un entrenador o un experto en preparación física que trabaje en un
gimnasio. Puede diseñar un programa que sea adecuado para ti y para tu nivel de
preparación física.
Los médicos saben que la mayoría de las personas se ven favorecidas con
el ejercicio regular, incluso las que tienen minusvalías o afecciones médicas,
como el asma. Si tienes un problema de salud o de otro tipo (como el
sobrepeso o distar mucho de estar en forma), habla con tu médico antes de
empezar cualquier programa de entrenamiento.
Teniendo en
cuenta los efectos beneficiosos que aporta el ejercicio físico al corazón, los
músculos, las articulaciones y la mente, es fácil saber por qué es inteligente
hacer ejercicio. Y lo mejor del ejercicio físico es que nunca es demasiado
tarde para empezar. Hasta las cosas más pequeñas cuentan como ejercicio cuando
se está empezando, como dar un breve paseo en bicicleta, pasear al perro o
pasar el rastrillo por el jardín.
Alimentacion saludable: MiPlato:
Guía nutricional
Para ayudar a
las personas a tomar decisiones alimenticias inteligentes, el Departamento de
Agricultura de EE. UU. (USDA, por sus siglas en inglés) ha diseñado un símbolo
fácil de seguir: MiPlato. El gráfico del plato, con sus distintos grupos de
alimentos, es un recordatorio de qué y de cuánto debemos colocar en nuestros
platos para mantenernos sanos.
Cómo funciona MiPlato
El gráfico
MiPlato tiene partes para la verdura, la fruta, los cereales y alimentos de
alto contenido en proteínas, así como un buen vaso de lácteos a un lado. Cada
parte tiene su código de color (el verde para la verdura, el rojo para la
fruta, el naranja para los cereales, el morado para las proteínas y el azul
para los lácteos), de modo que puedes ver a simple vista qué cantidad comer de
esos grupos de alimentos.
MiPlato nos
recuerda:
·
optar por la variedad: Las mejores comidas ofrecen un
contenido equilibrado de elementos pertenecientes a los distintos grupos de
alimentos.
·
La mitad de tu plato debe ser de verdura y fruta.
·
Haz que la mitad de los cereales que tomes sean
integrales.
·
Bebe leche descremada o semidescremada (al 1%) y agua
en vez de refrescos, bebidas deportivas y otras bebidas azucaradas.
·
Evita las RACIONES GRANDES.
Cinco grupos de alimentos
Los diferentes
grupos de alimentos contienen nutrientes diferentes y efectos beneficiosos
diferentes para la salud. Si te saltas un grupo de alimentos de forma habitual,
con el paso del tiempo, no recibirás la mejor nutrición.
1. Verduras y hortalizas
La parte de la verdura de MiPlato se muestra en verde. Es una de las
partes más grandes del plato. Esto se debe a que las verduras y las hortalizas
proporcionan muchas de las vitaminas y de los minerales que necesitamos
para tener una buena salud. Las verduras son bajas en calorías por naturaleza,
y la fibra que contienen nos ayuda a sentirnos satisfechos.
Elegir una
amplia variedad es importante en lo que respecta a la verdura: La verdura de
color verde oscuro (como el brócoli, las espinacas y la col rizada) suministra
nutrientes distintos que las hortalizas naranjas y rojas (como la calabaza, las
zanahorias y el boniato). El mensaje "comer en colores", que tal vez
oyeras en la enseñanza primaria, va bien seguirlo durante toda la vida.
2. Frutas
Al igual que la
verdura, la fruta contiene vitaminas, minerales y fibra. La parte roja de
MiPlato es un poco más pequeña que la verde pero, juntas, la fruta y la verdura
deben llenar la mitad del plato. La fruta entera es la mejor elección: los
zumos de frutas tienen más azúcar y más calorías por ración que la fruta
entera, y no contienen fibra.
Como con la
verdura, es bueno mezclar distintos tipos de frutas: un taza colorida llena de
fruta es más que solo bonita a la vista: es una fuente de nutritiva muy
potente.
3. Cereales
La parte naranja en el gráfico MiPlato ocupa aproximadamente un cuarto
del plato. Los cereales integrales (como la harina de trigo integral) son más
nutritivos y tienen mucha fibra dietética que te puede ayudar a
sentirte más lleno durante más tiempo. Los cereales refinados (harina blanca)
se han procesado, quitándoles las vitaminas, los minerales y la fibra. La
mayoría de los cereales refinados están enriquecidos, lo que significa que les
han vuelto a añadir algunos nutrientes, pero no la fibra, después de
procesarlos.
Por lo menos la
mitad de los cereales que comas deberían ser integrales, como el pan integral,
el arroz integral o la avena integral.
4. Proteínas
Los alimentos
de alto contenido proteico ayudan al cuerpo a construir y mantener sus tejidos.
También aportan vitaminas y minerales importantes, como el hierro.
La parte morada
de MiPlato ocupa aproximadamente un cuarto del plato. Los alimentos ricos en
proteínas incluyen la carne de ternera, el pollo, el marisco, las judías secas
y otras legumbres (como los guisantes), los huevos, los frutos secos y las
semillas. El tofu y las hamburguesas vegetarianas o los sustitutos vegetarianos
de la carne son buenas fuentes de proteínas. Cuando comas carne, elije opciones
magras o de bajo contenido en grasas.
5. Lácteos
El círculo azul
del gráfico MiPlato representa los productos lácteos ricos en calcio, como la
leche, el yogur y el queso. La leche de soja enriquecida con calcio también se
incluye en el grupo de los lácteos. El calcio es fundamental para tener unos
huesos y unos dientes fuertes. Opta por productos lácteos sin grasa de bajo
contenido en grasas la mayoría de las veces.
El círculo azul
muestra los lácteos al lado de la comida, como cuando se toman en forma de vaso
de leche. Pero los lácteos se pueden incorporar a la comida, como una
quesadilla de queso, o servirlos como un tentempié o un postre. Un yogur con
fruta fresca o un batido de frutas hecho con leche descremada son dos postres
excepcionales.
Cómo conseguir que MiPlato te funcione
Es fácil seguir
el gráfico MiPlato si estás comiendo una comida de "carne, fécula y
verdura", donde todo se sirve por separado.
¿Pero qué pasa
si te comes un sándwich o una comida donde se mezclan diferentes tipos de
alimentos, como una ensalada, un plato de pasta, un guisado o un salteado? Ahí
es cuando necesitas usar los principios de MiPlato a modo de guía, en vez de
copiarlo exactamente.
Para prepararte
un sándwich, deja que el gráfico de MiPlato te guíe sobre qué elegir. Un
sándwich saludable podría empezar por dos rebanadas de pan integral (tus
cereales). Añade una rodaja de carne, queso u otra proteína. Luego llena el
sándwich de verduras como la lechuga, el tomate o zanahorias ralladas.
Complétalo con una pieza de fruta y un vaso de leche descremada, a modo de
postre, y tendrás tu comida equilibrada.
Para comidas de
un solo plato (o ensaladas), asegúrate de que la mitad de lo que ingieras sea
verduras, hortalizas y frutas, de que aproximadamente un cuarto sea de proteína
magra y de que el otro cuarto sea de cereales, preferentemente integrales. Por
ejemplo, un plato de espaguetis podría ser de pasta integral con una albóndiga,
cubierto de tomate picado junto a otras verduras, como las espinacas o las
zanahorias. Un salteado podría contener verduras mezcladas con unos pocos
trozos de tofu o de pollo y arroz integral. Evita o limita las salsas de alto
contenido en grasas (como las cremosas) y no aliñes de demasiado las ensaladas.
MiPlato solo es
una guía. No todas las comidas que hagas cada día contendrán todos los grupos
de alimentos, pero trata de incluir tres o más. Consideremos, por ejemplo, el
desayuno: si te tomas un panecillo integral con queso cremoso para desayunar,
añade algo de fruta y tal vez un vaso de leche. Puedes ir añadiendo los grupos
de alimentos que aún falten, como las verduras, un poco más adelante durante el
mismo día.
Actividad: Luego de leer este material tan importante que hemos compartido en la
clase virtual del miércoles 13/5, les pido realicen preguntas en relación a las
dudas o inquietudes que les surgen en relación a los temas de Salud Y
Enfermedad que hemos trabajado en todas las clases hasta ahora, las mismas
serán contestadas en la Clase Virtual de Google Meet del 27/5.
Un cariño enorme, los extraño Profe Vero.
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